Mindfulness

La traducción del término inglés “mindfulness” al español es “atención plena” o “consciencia plena” aunque lo más popular es mantener el término en inglés.
A su vez la palabra “mindfulness” proviene del término “sati ”, del pali, la lengua de la tradición budista, que significa conciencia, atención y recuerdo.
Esto está bien pero aún se hace muy abstracto, veamos que es eso del mindfulness que tanto se habla.

Es posible cultivar la conciencia y la paz durante la meditación y la atención plena, pero estas dos prácticas tienen algunas diferencias clave. En el estado de mindfulness, la conciencia se desplaza hacia la nada, no hay concentración. No hay una intención específica durante la atención plena, como ocurre en la meditación formal. En cambio, la atención plena es un estado consciente en el que se aplica la mentalidad de la meditación.
El Dr. Jon Labat-Zinn, del Centro Médico de la Universidad de Massachusetts, subraya que, aunque podemos cultivar la atención plena a través de la meditación, no es la única forma de hacerlo.
“No se trata de sentarse en el loto completo, como si fueras una estatua en un museo británico. Se trata de vivir tu vida como si importara, con la conciencia del momento” Dr. Jon Labat-Zinn, dice en este vídeo de Greater Good

Mindfulness significa prestar atención de una manera especial: intencionadamente, en el momento presente y sin juzgar”
Jon Kabat-Zinn

“Mindfulness es la capacidad humana básica y universal, que consiste en la posibilidad de ser conscientes de los contenidos de la mente en este momento”
Vicente Simón

“Mindfulness o conciencia plena es una actitud concreta hacia la experiencia, o una manera de relacionarnos con la vida, que ofrece la promesa tanto de aliviar nuestro sufrimiento como de convertir la vida en una realidad rica y plena de sentido”

Ronald Siegel

El mindfulness es la capacidad de estar presentes, momento a momento, dándonos cuenta de lo que nos pasa, con curiosidad, ecuanimidad y amabilidad hacia nosotros mismos y la experiencia que acontece.

Se trata de ser conscientes de dónde estamos, de qué estamos haciendo y sin sobre-reaccionar o sentirnos desbordados por los acontecimiento y de «recordarnos» estar en el presente, es decir, constantemente estar volviendo al aquí y ahora.

Esa capacidad es innata. Los niños son mindful de serie, lo que pasa es que vamos perdiendo esa cualidad a medida que crecemos.

Con el paso del tiempo nos vamos adaptando al entorno y nuestro discurso mental se hace más patente. Esa cháchara mental, ese ruido interno que tanto fomenta el entorno de prisas, estrés y sobreestimulación en el que vivimos, nos desconecta del momento presente y de nosotros mismos.

Dejamos de enterarnos de lo que nos pasa y esto pone en peligro nuestro equilibrio mental y físico. La forma de poder recuperarlo es ejercitar esa capacidad innata a través de la práctica del mindfulness.

Estar presentes significa estar atentos y aunque tenemos la ilusión de controlar conscientemente nuestra atención, esta divaga la mayor parte del tiempo entre pensamientos acerca del pasado y del futuro, o bien reconociendo solo una pequeña porción de lo que está sucediendo en el presente dejando el resto de la experiencia al “piloto automático”.

Beneficios del Mindfulness


Un programa de 8 semanas de meditación mindfulness produce efectos positivos en el cerebro y el sistema inmune. Reduce las emociones contractivas y la ansiedad.

Salud Física

  • Se ha comprobado que un entrenamiento en mindfulness reduce significativamente el estrés o ansiedad en un 47%.
  • Incrementa la DHEA y la melatonina, hormonas consideradas como antídotos para el estrés.
  • Disminuye la tensión arterial y de las denominadas hormonas del estrés (adrenalina y cortisol).
  • Fortalece el sistema inmune.
  • Favorece el sueño y la relajación muscular.
  • Disminuye los niveles de colesterol y el riesgo de enfermedad cardiovascular.
  • Reduce los radicales libres y el daño a los tejidos.
  • Enlentece el proceso de envejecimiento.
  • Ayuda a manejar el dolor crónico.
  • Incrementa la energía vital.

Salud Psíquica

  • Los beneficios neurológicos de la práctica de Mindfulness han sido comprobados científicamente y se asocian al desarrollo de áreas cerebrales que incrementan la habilidad para manejar conflictos.
  • El estado de autoobservación que propicia la práctica formal, nos ayuda a indagar y conocer los propios modelos mentales. Esto permite salir del modo “piloto automático” en el que habitualmente vivimos y cambiar la reacción inconsciente por la respuesta consciente.
  • La práctica del Mindfulness nos permite afinar la escucha interna y nos conecta con nuestras necesidades, aquellas que si a menudo quedan desatendidas, nos llevan a estados de incoherencia que cuando perduran en el tiempo generan insatisfacción y en última instancia enfermedad.
  • La práctica del Mindfulness desarrolla la inteligencia cardíaca y nos permite relacionarnos adecuadamente con la experiencia que sucede, ayudándonos a actuar coherentemente con lo que pensamos y sentimos.
  • Aumenta la concentración y el foco.
  • Nos orienta a la consecución de objetivos.
  • Proporciona mayor claridad de percepción y discernimiento.
  • Aumenta el nivel de consciencia individual y grupal.
  • Aumenta el nivel de satisfacción y la confianza personal.
  • Nos conecta con nuestra fuente interna de automotivación.
  • Capacita para la gestión emocional.
  • Reduce la impulsividad.
  • Nos hace más empáticos, compasivos y ecuánimes.
  • Mejora la comunicación fomentando la escucha activa y la respuesta asertiva.
  • Mejora la resiliencia fortaleciéndonos ante la adversidad.
  • Mejora el manejo de los imprevistos y de los conflictos.
  • Estimula el pensamiento lateral y la creatividad.
  • Nos ayuda a gestionar el cambio.
  • Las investigaciones sugieren que el mindfulness ayuda con los síntomas físicos y psicológicos. Existen numerosos beneficios de la atención plena que se pueden obtener mediante la práctica regular de la meditación. Algunos de ellos son:
  • Beneficios para la salud mental:
  • Aumento de la autocompasión
  • Reducción del estrés
  • Regulación emocional
  • Mejora del conocimiento de sí mismo
  • Reducción de los síntomas de ansiedad
  • Mayor bienestar
  • Gestión del estrés
  • Mejora de la salud psicológica